LA ILUMINACION EN LA FOTOGRAFIA DE RETRATO
LA ILUMINACION EN LA FOTOGRAFIA DE RETRATO
En principio, los dispositivos de iluminación para retrato son idénticos a los necesarios para cualquier otro tema. En la iluminación artificial la regla básica es que todos los objetos o elementos de la imagen deben recibir la iluminación principal desde una sola dirección; en otras palabras: las sombras no deben dar información contradictoria sobre la posición relativa de la fuente de luz, sino que todas empleadas deben subordinarse a una principal. Este principio se aplica tanto para el retrato como a, por ejemplo, la naturaleza muerta; si se ignora, el resultado será artificioso. como formado por la reunión de elementos de varias fotografías distintas.
Casi todos los retratos se pueden iluminar con una sola fuente de luz y un reflector; para iluminar bien un retrato no hace falta un equipo impresionante y, solo hará falta otra mas si se considera necesario un relleno mas intenso de las sombras o la iluminación del fondo.
Iluminación Dura y Suave
Lo primero que hay que decidir es si el sujeto precisa una iluminación dura o suave. La dura da un contraste grande entre las luces y las sombras, produciendo contornos definidos y texturas aparentes. La luz suave, por el contrario, suele ser mas adecuada para dar un modelado delicado y texturas suaves. Por ejemplo, cuando se trata de subrayar algún elemento muy característico de la personalidad del modelo, la imagen mas fuerte que produce la luz dura será posiblemente la mas apropiada. Frente a esto, la luz suave reproducirá mejor la piel suave de un niño. No obstante, hay que estar dispuesto a experimentar, porque no hay ninguna norma que regule el empleo de la luz suave y la dura, y en cualquier caso, el efecto perseguido no dependerá exclusivamente de la iluminación.
Para que la luz sea dura basta con dirigir directamente hacia el sujeto el flash o la lampara. Y se suaviza mediante cualquier procesamiento de difusión o dispersión, dependiendo de lo que se pretenda conseguir; una forma es cubrir la lampara con algún material difusor, como papel calco o una tela fina; otra es reflejando la luz en la pared o en pantallas al efecto. trabajando en color hay que fijarse en que tales superficies no estén coloreadas ni introduzcan dominantes no deseadas. Otra posibilidad es emplear bombillas apuntaladas con reflectores planos que emitan un haz extenso de luz. En cuanto al flash, el procedimiento de difusión mas conocido es un paraguas cuya superficie interior es blanca o plateada ( o las dos cosas a la vez); el flash se dirige hacia dicho interior, que lo refleja hacia el sujeto, con un resultado muy suave. Pero estos paraguas suelen ser accesorios de sistemas caros, con flashes muy potentes conectados a la red, cuyo precio esta fuera del alcance de la mayoría de los aficionados.
Las pantallas reflectoras, blanca o cubiertas de una hoja metálica, son muy útiles en el estudio. Son fáciles de trasladar a cualquier parte y permiten rellenar sombras sin necesidad de lamparas adicionales. Son faciales de construir con cartulina o con papel aluminio.
Al disponer la iluminación hay que tener en cuenta la comodidad del retratado. Una de las ventajas del flash en este sentido es que no da calor. No rodee nunca al modelo con el equipo, por que se sentiría atrapado. Por la misma razón es mejor usar objetivo de focal algo mayor que el normal, para poder situar la cámara a una distancia razonable.
John Vargas
Fotografo y CEO
John Vargas Fotografia
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